miércoles, 25 de junio de 2008

TODOS SOMOS RUFIANES ? bueno algunos si

Este "gran actor" supongo que canonnizado al igual que otros muchos, famoso en la Academia, por interpretar grandes papeles, como makinavaja, hizo este alarde del lenguaje politicamente correcto y educado. Parece que ahora se ha reabierto el caso, y se le imputa un delito de calumnias, que creo no tiene importancia mas que la que a un tonto se le puede dar, pero lo importante es como se amparo estos insultos por parte de algunos, y si no ver la imagen de la ministra " melon ".










AQUIE ESTA LA MINISTRA " MELON" DE VERDE COMO NO.


4 comentarios:

Anónimo dijo...

No tenía intenciones de hacer ningun tipo de comentario sobre las palabras de este impresentable personajillo de mierda, porque si está rebotado con su puta vida y su supuesto país, el que se tiene que ir a la puta mierda es el. Aunque bien pensado, ya está de mierda hasta el cuello el rubianes.
Como podéis comprobar, es muy facil decir tacos, insultar, menospreciar a la gente, y tener los cojones continuamente en la boca, algo a lo que ya estas acostombrado desde muy temprana edad. Pero lo que realmente es difícil, y más para tí, rubianes, es ser culto y educado, con lo cual doy por terminado mi comentario, dejando claro, que tus palabras son fruto de la incultura, la asuncia total de la verguenza y un fracasado total en la vida en cualquiera de los campos que te quieras situar, bien sea social, sentimental, familiar, laborar, y un largo etcétera, que sólo conoces tú. Y perdona que no escriba tu nombre de "rubianes" con MAYUSCULAS, pero es que aún no has llegado a ese nivel.
saludos a todos los seguidores de las cosas claras, y a ver si es posible que este comentario le pueda llegar a ese aborto de la naturaleza, claro, que para eso tiene que saber leer y ser "ESPAÑOL".
Firmado:Curro

Jack dijo...

gracias curro, nada mas que añadir.

Anónimo dijo...

El misterioso 'milagro' Polaris
El misterioso 'milagro' Polaris
El entramado de favores políticos nubla el éxito de una constructora que en cuatro años de vida supera los 600 millones de facturación
LUIS GÓMEZ / RAFAEL MÉNDEZ - Madrid


Quizás el 11 de noviembre de 2005 sea una fecha difícil de olvidar para los propietarios de Polaris World, una empresa constructora murciana con proyección internacional que ha experimentado un crecimiento milagroso: con cuatro años de edad, factura por encima de los 600 millones de euros. Aquél día, una desconocida concejal de un modesto pueblo echó atrás todo un megaproyecto valorado en 4.000 millones de euros. Era Teresa Rodríguez, concejal por el Partido Popular en la localidad de Alhama. La mujer rompió la disciplina de partido y votó no.

Desde entonces la inmaculada imagen de Polaris comenzó a verse salpicada de sospechas e informaciones desagradables. Lo que antes era un nuevo concepto inmobiliario empezó a ser visto como un simple pelotazo. Su imagen productiva y benefactora empezó a confundirse entre acusaciones de influencia política. Sus gestores cambiaron su lenguaje amable por la amenaza. Algo ha cambiado alrededor de Polaris desde aquel 11 de noviembre.

Polaris era un ejemplo de excelencia empresarial. Tenía una ventaja sobre sus competidores: la imagen. Una imagen elaborada por gabinetes especializados que cuidaron todos los detalles, desde el diseño del logotipo, hasta el nombre (Polaris es la Estrella Polar y se escribe igual en varios idiomas), pasando por acciones sociales como el patrocinio de equipos deportivos a la colaboración con países del tercer mundo a través, naturalmente, de la Fundación Polaris. La publicidad es un punto fuerte de una empresa que reconoce gastar 30 millones anuales en marketing y que actúa a lo grande, como un número uno: hay que diseñar campos de golf, se ficha al legendario Jack Nicklaus por 1,2 millones; hay que darse a conocer en España, fichan al entrenador Camacho; hay problemas de agua para los campos de golf, anuncia la construcción de una desaladora.

De esa suerte, detrás de Polaris no parecía haber cemento y especulación. De la nada, Polaris se convirtió en cuatro años en un holding de 57 sociedades con oficinas en media Europa y en Asia. Su poderío no dejaba lugar a dudas: declaraba tener una reserva de suelo de 40 millones de metros cuadrados, facturar 600 millones de euros en 2004 y entregar de aquí a 2008 un total de 11.400 viviendas en sus cinco complejos, rodeados de campos de golf y hoteles de cinco estrellas. Polaris cuenta con 900 empleados y da trabajo a otros 5.000.

El nuevo concepto de esta empresa tenía mucho que ver con sus 57 sociedades. Son las 57 caras de Polaris. "Otros realizan una promoción y ahí termina su negocio. Nosotros nos quedamos dentro de los complejos que construimos dando todos los servicios de una ciudad", dice Pedro García Meroño, uno de sus propietarios, en una entrevista a un periódico económico.

La empresa, a través de sus 57 filiales, ofrece a sus clientes todos los servicios imaginables sin reparar en medios. Basta visitar sus invernaderos, donde en una superficie de más de un millón de metros cuadrados, equivalente a 237 campos de fútbol, se cuidan todo tipo de plantas, incluidas espléndidas palmeras importadas del norte de África. Esos invernaderos luego repoblarán cada una de sus cinco urbanizaciones a través de Polaris Gardens. Pero hay más: Polaris Supermarket se encargará de los comercios. Polaris Salud, del centro médico. Polaris School garantiza un colegio bilingüe para los hijos de los vecinos. Polaris Rent a Car facilita el alquiler de un coche o el traslado desde el aeropuerto a la urbanización. Polaris Telecom cuida de que disponga de línea ADSL, telefonía o televisión por satélite. Polaris Home Style amuebla su casa. Y así sucesivamente, de tal forma que Polaris contará entre sus empleados a médicos, camareros, cocineros, profesores o técnicos informáticos, además de jardineros y diseñadores. Todo eso es el nuevo concepto que venden sus propietarios: usted compra la casa y Polaris se encarga de todo lo demás.

Polaris navegaba con viento a favor y recibía el beneplácito de las instituciones bancarias. Así, entre 2 de diciembre de 2004 y el 26 de julio de 2005 firmó tres créditos con diferentes entidades bancarias, alguno de ellos sindicados, por un valor total de 1.018 millones de euros, un montante desconocido para cualquier otra empresa de su sector.

La actividad de Polaris no tenía fin. Y así se presentó en sociedad su gran proyecto, Condado de Alhama: 28.000 viviendas y tres campos de golf en diez millones de metros cuadrados. La inversión superaría los 4.000 millones de euros.

Sin embargo, esta nueva apuesta encontró un suceso imprevisto: la negativa de la concejal Teresa Rodríguez. Su voto en contra rompía el leve equilibrio político en Alhama, gobernada por el PP con ocho concejales por siete de la oposición. Ese voto de ventaja se perdió con la decisión de Teresa. Y con ello el proyecto.

Eso sucedió el 11 de noviembre y desde entonces no todo han sido buenas noticias en la impecable expansión de Polaris. Polaris había sabido navegar por encima de las polémicas. Ningún conflicto le había tocado de lado. Hasta ese día.

La negativa de Teresa Rodríguez levantó la curiosidad por esta empresa, propiedad de dos empresarios de Torre Pacheco que habían sabido pasar desapercibidos, Pedro García Meroño y Facundo Armero. La curiosidad reveló que la empresa había adelantado cuatro millones de euros al Ayuntamiento de Alhama antes de la recalificación; que le había regalado al Gobierno regional una autovía para conectar su complejo con la playa; que era una de las cinco empresas constructoras que resultaron beneficiadas en la gestión de la televisión autonómica, y que uno de los dueños de Polaris había sido socio del hermano del presidente de Murcia en una recalificación en la capital junto al concejal de Fomento del Ayuntamiento de Murcia, del PP. Polaris tenía estrechos vínculos con el PP, que Gobierna Murcia con mayoría absoluta desde hace 11 años.

Después de aquella contrariedad, aquella imagen limpia y amable elaborada en un laboratorio se ha quebrado. Polaris logra que los bancos intermedien para celebrar una entrevista con los dirigentes del PSOE en Murcia y tratar de obtener su visto bueno, pero no lo consiguen.

Por otra parte, Polaris amenaza con marcharse de Murcia y provocar numerosos despidos. Los responsables de Polaris no aceptan entrevistas con la prensa en estas fechas. Y el director general, José Luis Hernández, se presenta en una conferencia de prensa precedido de una docena de trabajadores al más puro estilo demagógico. Ahora mucha gente se pregunta cómo ha sido posible un crecimiento tan extraordinario en tan breve tiempo, una expansión que no tiene comparación en el mundo empresarial español. Y se pregunta también qué daño ha podido ocasionar a un entramado tan aparentemente sólido el voto negativo de una modesta concejala. Polaris ahora despierta muchas preguntas que están sin respuesta.

Anónimo dijo...

Polaris TIENE estrechos vínculos con el PP, que Gobierna Murcia con mayoría absoluta desde hace 11 años.